¿Un refrigerio?
Estamos a comienzos del verano. La vid está en flor o lo estará muy pronto. En las vides, es el momento del recorte, que es una “poda de verano”. Comienza a finales de junio o comienzos de julio y se prolonga hasta la vendimia. Más bien deberíamos hablar de “recortes” en plural: en efecto, la operación se realiza en dos pasadas como mínimo, y puede requerir hasta cuatro. Esta operación indispensable permite evitar que la vegetación se desarrolle demasiado y, de este modo, dejar todo el espacio para los preciados frutos.